miércoles, 17 de abril de 2013

Tiempos de Golpes



Por: Silvestre Montilla

Dadas las circunstancias que está viviendo nuestro país nos obliga a realizar distintos análisis para  obtener una visión clara de todos los escenarios y un posible plan de acción en respuesta a la ofensiva de la derecha internacional.

Para nadie es un secreto que la derecha nacional no es autónoma en su accionar, esto se ha visto en diversos planes que se llevaron a cabo en años anteriores, como por ejemplo el suceso acaecido el 11 de Abril de 2002 y el paro petrolero en diciembre del mismo año.

La estrategia injerencista estadounidense planteada en Latinoamérica ha tenido diversos matices: Honduras (2009), la enmienda en la ley electoral del país centroamericano se manejó por los grandes medios de comunicación como un intento de manipular el sistema electoral en beneficio del Presidente para esa época Manuel Zelaya, en ese caso EEUU tomó un papel ambiguo declarando que se “restituya el orden constitucional” pero por otro lado prestando apoyo en distintas áreas al golpe militar.

Ecuador (2010) el intento golpe de estado se planteó con una supuesta huelga de policías que se mostró como pacifica pero que en realidad era un plan para la desestabilización y el derrocamiento del Gobierno ecuatoriano, de la misma forma el papel de EEUU fue dual expresando una vez más un supuesto apoyo al presidente constitucional pero que en el accionar era incoherente con esa postura.

Paraguay (2012) esta vez la estrategia fue bosquejada en el formato de Golpe Blando, donde la Cámara de Diputados de Paraguay hizo uso de parapetos jurídicos para culpar al  Presidente electo, de unos enfrentamientos entre campesinos en una región del país lo cual hizo retroceder el proceso de la histórica lucha  del pueblo paraguayo.

En estos últimos años los EEUU se han mostrado de una forma más agresiva, y esta aseveración la corrobora el libreto que usó en la llamada Primavera Árabe, más específicamente en el caso de Libia y de Siria, donde afilaron las contradicciones sociales, llevándolo a una sangrienta guerra civil en la que la primera fase, era deslegitimar al gobierno constituido manipulando mediáticamente la situación del país, y una segunda fase que consistía en infiltrar grupos mercenarios y paramilitares que obedecían a los intereses de las potencias occidentales. Cabe destacar que ambas fases eran complementarias la una con la otra en el marco de la guerra de 4ta generación.

Aterrizando el análisis a nuestro actual momento histórico, nos preocupa de sobremanera la semejanza que pueden tener los eventos acontecidos en estos últimos días donde la derecha ha tenido un discurso de no reconocimiento al Gobierno electo por el pueblo venezolano.

A pesar de que internacionalmente el Gobierno Bolivariano de Nicolás Maduro ha sido reconocido por toda Sudamérica y Centroamérica (con la excepción de Paraguay y Panamá) y por varios gobiernos europeos (Portugal y Francia), no ha habido una postura clara de la Unión Europea y una posición de desconocimiento por los EEUU, lo cual nos puede plantear un libreto semejante no sólo como el del 11-A sino también como los que se ha venido desarrollando en los últimos años en los territorios árabes.

Vemos que la ultraderecha nacional e internacional no titubea en inundar a Venezuela en un clima de violencia y de zozobra, que podría llegar a asemejarse a los sucesos ocurridos en Libia y Siria, pasando por encima del derecho internacional, el principio de autodeterminación de los pueblos y violando la soberanía de nuestra nación.

Es por eso que llamamos al Bravo Pueblo a organizarse, recordemos que sólo el pueblo salva al pueblo, ser firme como nos enseñó el Comandante Chávez, no caer ante provocaciones ante la arremetida de sectores apátridas. Aplastemos la conspiración, impulsemos la revolución.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario